Los herradores eran los encargados de poner las
herraduras a las caballerías, caballos, yegüas,, mulos, mulas, burros…etc. La importancia de esta profesión,
ligada a las labores del campo era fundamental, comparable con la importancia
actual de los servicios de cambio de ruedas en los coches.
En Miguelturra yo recuerdo una herraderia que
estaba en la Plaza del Pradillo (de Clavería), mas o menos a la altura del nº 4
actual, cuando dicha plaza solo tenía en su centro un pozo y un pilón (así
llamado: “el pilón”) para el ganado.
Era un local mediano, con un fuego de herrero en
una esquina y multitud de herraduras colgadas en las paredes. Las caballerías
se maniataban y el herrador procedía al cambio de las herraduras con, básicamente
tres herramientas: Martillo, tenazas y punzón.
En la escena se ven muy diferenciados dos
movimientos, el del herrador martilleando la pezuña de la mula, y el de la
cabeza de la mula que se mueve en sincronía con los martillazos recibidos.
Ambos movimientos están originados con un motor asíncrono
pequeño, AC, 220 V, 18-20 rpm, similar al de los microondas, pero con más
velocidad y su sentido de giro es no influye en la escena, por lo que no es
necesario que esté predeterminado. En varias ocasiones hemos comentado la
posibilidad de realizar movimientos de brazos similares al que estamos viendo,
y en una próxima página dedicada a las fraguas veremos con mas detalle un nuevo
método, muy sencillo. Pero aprovechando esta escena vamos a ver una de las múltiples
aplicaciones a escenas con movimiento que tienen los imanes. Y tan poco usadas
en este hobby.
Para empezar, es bueno
saber que en nuestro día a día estamos prácticamente rodeados de ellos aunque
no los veamos, en la figura se muestran algunos de ellos. Una característica muy
conocida de los imanes es que tiene la propiedad de atraerse o repelerse entre
si según enfrentemos polos magnéticos distintos o no, o incluso pueden atraer a
materiales tales como el hierro y otros parecidos (materiales ferromagnéticos)
y en cambio no tienen actuación alguna sobre otros tales como madera, cartón…etc.
Esta característica,
nos permite generar movimientos, sin que haya conexión física, simplemente con
acercar o alejar imanes entre si. Por tanto si montamos, como es el caso, un
imán sobre una barra que gire solidaria con el eje de un motor, y otro en la
cabeza de la mula, podemos obtener el
movimiento deseado, con el solo giro del motor
En el caso de que solo
tengamos un imán, el otro puede sustituirse por un trozo de hierro o chapa
(atención algunos materiales que se parecen al hierro no tienen estas características:
acero inox, aluminio,….etc), pero si lo hacemos así solo podremos obtener el
efecto de atracción.
En este apartado es
muy importante, la forma de realizar la unión entre la parte móvil y la parte
fija de la figura que queremos mover y según sea esta el resultado puede ser
muy diferente. En efecto, en la mula de
prueba, la unión se realiza mediante un muelle, en este caso la cabeza queda
vibrando, tras el paso del imán del motor, pero en el caso de la escena, la
unión se realiza a través de una bisagra, con lo que tras el paso del imán la
cabeza vuelve a su posición de normal y se queda quieta (en este caso la
posición normal viene determinada por el propio peso de la cabeza y el imán móvil
actúa, por repulsión, levantando la cabeza y cuando termina su efecto, la
cabeza vuelve a caer), cada cual elija la que mejor se ajuste a sus deseos
Finalmente, me queda
llamar la atención sobre la fuerza que esta
idea puede tener para escenas tales como gallinas picoteando en el
suelo, ovejas pastando,….etc (solo necesitarán un trocito de hierro en su
cabeza y un imán (o varios enganchados al mismo motor) que gire bajo sus pies.
Como es habitual
acompaño del vídeo en el que el movimiento se ve mejor
Los días de viento, mirando desde la ferretería de
mi abuela hacia la plaza del Ayuntamiento, se veían al fondo entre las
calles de Paquito León y Gral
Aguilera, arboles inmensos que sobresalían por encima de los
tejados moviéndose de un lado a otro, tanto que parecían ir a saltar sobre las
tejas, o llevarse a los niños volando como nos decian
La escena que acometo
no pretende representar una arboleda en un vendaval (entre otras razones,
porque aún no sé cómo hacerlo, aunque no lo descarto más adelante) sino más
bien movida por un vientecillo medio y está concebida para ser puesta detrás de
algunas casas, por eso no es muy
importante que tenga mucha base. Los que estén atentos ya habrán descubierto
que hay un tema parecido: Palmera movida por el viento http://youtu.be/E-OCgC44fIY , el principio de funcionamiento es el
mismo, pero la ejecución varía mucho, entre otras razones porque la escena está
concebida para mover varios árboles.
Está concebida para
ser movida por un motor de baja velocidad (en este caso 3 rpm) y es indiferente
que el giro del mismo sea en sentido horario o al contrario, es decir es un
motor típico de microondas. El principio de funcionamiento es el que se refleja
en el siguiente esquema
La generación del movimiento se realiza a través de un cigüeñal simple, en el que se
colocan varias bielas, las cuales actúan sobre los troncos de los arboles por
abajo (bajo tierra). Hay que darse cuenta de que el movimiento que se pretende,
no es el de una perfección total, sino todo lo contrario, dar la sensación de
cierto caos, no mucho, ya que cuando los árboles se agitan con un viento medio,
aunque parece increíble, no se mueven todos a la vez y en una misma dirección
sino que lo hacen de forma caótica (unos para un lado y otros para otro) y unos
más que otros.
Se ha pretendido conseguir el efecto antes dicho básicamente de
cuatro maneras distintas:
1.- Disponiendo los arboles alrededor
del eje de giro, con lo cual cada uno tendrá un sentido de alejamiento y
acercamiento a dicho eje según su posición
2.- Dejando gran distancia entre las
bielas superiores e inferiores (se podían haber fabricado con arandelas muy
planas), para que el desplazamiento de los arboles sea distinto de unos a
otros. Aquellos cuyas bielas estén abajo se moverán menos que los que estén
arriba
3.- Mediante la fabricación de algunas bielas con brazo articulado
4.- Mediante la simulación de árboles
con alturas, texturas y colores distintos, para acentuar las diferencias
Cigüeñal:
El cigüeñal es muy simple, y consiste en una barra (lo
suficientemente rígida para los esfuerzos que va a hacer) a la que se le suelda
en su parte inferior un tornillo, para acoplarlo al taladro del eje del motor,
y por su parte superior se cierra con una pieza, que se puede quitar y poner y
que sirve de apoyo del mismo en el
soporte. Hay que dejar claro que es absolutamente necesario hacer este soporte,
ya que de no hacerlo el cigüeñal recibiría mucha tensión en su acople con el
eje del motor. Al terminar todo el montaje es conveniente fijar las tuercas de
amarre al eje del motor y de la pieza de cierre con algún pegamento para hierro
(Nural 21)
Bielas:
La mayoría de las bielas son simples, de manera que en general una
biela actúa sobre un solo árbol, para ello se hace en la parte inferior del
tronco del árbol un taladro, más grande
que el alambre para que este pase con holgura a su través (tener en cuenta que
ha de dejar holgura para el movimiento del árbol, y para el cambio de
orientación de la biela, es decir holgura vertical y horizontal). El alambre se
fija en la posición deseada con unos topes, en este caso he usado regletas
eléctricas y al final cuando lo damos por definitivo lo sellamos con plástico
fundido
Sin embargo también se
puede aprovechar para que una misma biela actúe sobre varios árboles, en este caso hay una biela que actúa sobre
tres árboles
En algunos casos es necesario desviar la biela hacia abajo, para
evitar que el movimiento del árbol sea muy pronunciado, por un ataque a la base
del árbol demasiado cerca de su eje de
giro, esto ocurre especialmente con las bielas superiores
En un caso se ha utilizado una biela con un brazo articulado, cuyo
esquema es el que se describe en la
figura siguiente. En este caso el taladro en el tronco del árbol por el que
pasa la biela ha de tener bastante holgura, y los topes también, todo ello para
absorber la tendencia al giro y al desplazamiento en un sentido distinto al del
brazo
Los arboles:
La conexión del tronco del árbol con el sistema de tracción se
realiza, como ya he comentado con anterioridad a través de un taladro por el
que pasa la biela y que se ancla con dos topes (regletas eléctricas) todo ello
bajo la línea de tierra. El árbol en si mismo se apoya en un eje, sobre el que
también gira, situado a nivel del suelo. El taladro para el paso de la biela y
el taladro para el paso del eje soporte
son perpendiculares entre si, obviamente.
El árbol propiamente dicho, está formado por distintas texturas de
follaje natural pegadas sobre un trozo de tubo (en este caso tubo de las
cortinas que hay en cualquier ferretería) y este se mete en el tronco, lo cual
permite ponerlos y quitarlos sin problemas, y con la forma y color según el
parecer de cada uno
Decoración
Aunque la escena está diseñada para montarse detrás de otras
casas, incluso de dos pisos, al final he tapado todo el mecanismo con una
simulación de paredes viejas, muy deterioradas en su pintura, incluso con un
gran “desconchón”
Como nota final, indicar que el suelo lo he tapado con unos
trapos, pintados con arcilla, pero teniendo cuidado de que las salidas de los
arboles no se queden rígidas (por eso no he usado escayola), lo cual impediría
su movimiento. Y algunos arbustillos estratégicamente puestos.
La Parroquia de La Milagrosa de Madrid (no confundir con la
Asociación de belenistas de la Comunidad de Madrid La Milagrosa) me ha
encargado la reparación de tres figuras de 20 cms de su colección. Estas
figuras presentan el siguiente cuadro:
Herrador: Algunas veces se para,
y el motor se calienta mucho
Alfarero: Presenta evidencias de
rotura y además el motor se atasca
Virgen: No funciona
Virgen:
Al abrir la tapa que tiene en la parte inferior,
observamos que la barra insertada en el acoplamiento al motor y que sirve para
mover (tirando) de los hilos de nylon, la cabeza y los brazos, esta rota. La
solución es poner una nueva y para que la conexión sea mas robusta lo vamos a
hacer con un tornillo. Esto nos da la oportunidad de ver como se puede convertir un
taladro que no sea roscado en otro que si lo sea
Para hacerlo necesitamos: un juego de machos (así se llaman
y se compran en las ferreterías, son unas varillas roscadas de material muy
duro que al meterlas en un taladro un poco mas pequeño van haciendo poco a poco
la rosca) de la medida de rosca deseada y una broca de hierro adecuada para el
juego de machos y naturalmente paciencia
Por otro lado esta reparación nos permite estudiar con
detalle el sistema de movimiento, el cual consiste en mantener las partes móviles
sujetas de manera no fija (en este caso mediante muelles) y moverlas tirando de
ellas mediante hilos que son movidos a su vez por un motor
Alfarero:
El alfarero, es otro ejemplo muy frecuente de problemas en
el movimiento de figuras, y se da cuando el sistema que genera el movimiento
funciona perfectamente, pero la rotura o mala colocación de otros elementos
impiden el movimiento. En este caso es la mesa del propio alfarero la cual está
descolocada (y algo rota) la que hace que el sistema se atasque y que el
movimiento sea muy deficiente (o incluso llegue a pararse)
Y en efecto la reparación ha consistido en por un lado guiar
mejor el eje que girando transmite el movimiento a la pieza que manipula el
alfarero, por otro lado agrandar el paso del eje a través de la mesa (para que
no roce) y finalmente pegar la mesa poniendo atención a evitar interferencias con
el movimiento
Herrador:
Figuras con el mismo principio de funcionamiento que el
herrador son muy frecuentes. Estas figuras funcionan según el siguiente esquema
mecánico
En este tipo de composiciones son muy frecuentes cuatro
tipos de fallos muy identificados:
1.- Rotura o desenganche del
cable en la zona visible (bajo la tapa inferior)
2.- Rotura o desenganche del
cable en la zona del brazo (accesible bajo el turbante)
3.- El acoplamiento patina en el
eje del motor
4.- El motor no funciona
(generalmente por fallo del último piñón)
En este caso concreto, observamos que el motor no funciona
correctamente, es decir el fallo nº4, al abrirlo vemos que efectivamente el ultimo
piñón está dañado.
En estos casos, lo más lógico es cambiar el motor por uno
nuevo, pero dado que esto es un tutorial vamos a ver que la reparación es muy
sencilla, y seguimos los pasos siguientes:
Paso 1: Desmontar el piñón del
eje. Poniendo atención a su exacta situación, para que luego al montarlo quede
exactamente en su sitio, de no hacerlo así, quedará alto o bajo en el eje y no
funcionará correctamente o no podrá ponerse la tapa del motor.
Paso 2: Hacer unos taladros muy finos a ambos lados de la
rotura
Paso 3: Unir con alambre la
fisura. La unión ha de quedar perfectamente ajustada, de no hacerlo así luego
este piñón patinará con el otro piñón.
Paso 4: Sellar la unión con
pegamento. En este caso se ha hecho con Nural 21 (Pattex)
Paso 5: Insertar y pegar (pegar
después del paso 6) el piñón en su eje (en la posición observada en el paso 1)
Paso 6: Sujetando a mano el
conjunto eje-piñón, comprobar con corriente el correcto funcionamiento
Aunque no es el caso, pero ya que tenemos las piezas
desmontadas, hemos aprovechado para poner un pasador entre el eje del motor y
el acoplamiento, para evitar la avería (frecuentísima) nº 3