(22-11-14)
Los herradores eran los encargados de poner las
herraduras a las caballerías, caballos, yegüas,, mulos, mulas, burros…etc. La importancia de esta profesión,
ligada a las labores del campo era fundamental, comparable con la importancia
actual de los servicios de cambio de ruedas en los coches.
En Miguelturra yo recuerdo una herraderia que
estaba en la Plaza del Pradillo (de Clavería), mas o menos a la altura del nº 4
actual, cuando dicha plaza solo tenía en su centro un pozo y un pilón (así
llamado: “el pilón”) para el ganado.
Era un local mediano, con un fuego de herrero en
una esquina y multitud de herraduras colgadas en las paredes. Las caballerías
se maniataban y el herrador procedía al cambio de las herraduras con, básicamente
tres herramientas: Martillo, tenazas y punzón.
En la escena se ven muy diferenciados dos
movimientos, el del herrador martilleando la pezuña de la mula, y el de la
cabeza de la mula que se mueve en sincronía con los martillazos recibidos.
Ambos movimientos están originados con un motor asíncrono
pequeño, AC, 220 V, 18-20 rpm, similar al de los microondas, pero con más
velocidad y su sentido de giro es no influye en la escena, por lo que no es
necesario que esté predeterminado. En varias ocasiones hemos comentado la
posibilidad de realizar movimientos de brazos similares al que estamos viendo,
y en una próxima página dedicada a las fraguas veremos con mas detalle un nuevo
método, muy sencillo. Pero aprovechando esta escena vamos a ver una de las múltiples
aplicaciones a escenas con movimiento que tienen los imanes. Y tan poco usadas
en este hobby.
Para empezar, es bueno
saber que en nuestro día a día estamos prácticamente rodeados de ellos aunque
no los veamos, en la figura se muestran algunos de ellos. Una característica muy
conocida de los imanes es que tiene la propiedad de atraerse o repelerse entre
si según enfrentemos polos magnéticos distintos o no, o incluso pueden atraer a
materiales tales como el hierro y otros parecidos (materiales ferromagnéticos)
y en cambio no tienen actuación alguna sobre otros tales como madera, cartón…etc.
Esta característica,
nos permite generar movimientos, sin que haya conexión física, simplemente con
acercar o alejar imanes entre si. Por tanto si montamos, como es el caso, un
imán sobre una barra que gire solidaria con el eje de un motor, y otro en la
cabeza de la mula, podemos obtener el
movimiento deseado, con el solo giro del motor
En el caso de que solo tengamos un imán, el otro puede sustituirse por un trozo de hierro o chapa (atención algunos materiales que se parecen al hierro no tienen estas características: acero inox, aluminio,….etc), pero si lo hacemos así solo podremos obtener el efecto de atracción.
En este apartado es
muy importante, la forma de realizar la unión entre la parte móvil y la parte
fija de la figura que queremos mover y según sea esta el resultado puede ser
muy diferente. En efecto, en la mula de
prueba, la unión se realiza mediante un muelle, en este caso la cabeza queda
vibrando, tras el paso del imán del motor, pero en el caso de la escena, la
unión se realiza a través de una bisagra, con lo que tras el paso del imán la
cabeza vuelve a su posición de normal y se queda quieta (en este caso la
posición normal viene determinada por el propio peso de la cabeza y el imán móvil
actúa, por repulsión, levantando la cabeza y cuando termina su efecto, la
cabeza vuelve a caer), cada cual elija la que mejor se ajuste a sus deseos
Finalmente, me queda
llamar la atención sobre la fuerza que esta
idea puede tener para escenas tales como gallinas picoteando en el
suelo, ovejas pastando,….etc (solo necesitarán un trocito de hierro en su
cabeza y un imán (o varios enganchados al mismo motor) que gire bajo sus pies.
Como es habitual
acompaño del vídeo en el que el movimiento se ve mejor
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